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¡Este plato te hará enamorarte del pescado en segundos!

Fiesta de vacaciones – Un plato espectacular para la víspera del Año Nuevo Chino

Pescado Mandarín en Forma de Ardilla

Incluso las personas que normalmente no disfrutan del pescado no pueden evitar seguir comiendo este Pescado Mandarín en Forma de Ardilla, que muchos consideran un plato que solo se encuentra en restaurantes. Con su exterior crujiente y su interior tierno, sin espinas de pescado, y su salsa agridulce que estimula el apetito, es un plato amado tanto por jóvenes como por mayores.

La preparación es un poco compleja, pero la receta ha sido registrada con gran detalle. Desplázate hacia abajo para ver si puedes seguirla claramente.

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Ingredientes:

  • Pescado mandarín
  • Jengibre
  • Vino de cocina
  • Sal
  • Almidón de maíz
  • Ketchup
  • Vinagre blanco
  • Azúcar blanco suave
  • Guisantes verdes
  • Zanahorias en cubos
  • Piñones

Preparación:

Corta la cabeza del pez mandarín, retira las aletas y los huesos sobrantes de la cabeza, permitiendo que la cabeza se mantenga erguida en el plato.

Con el cuchillo a lo largo de la espina, corta horizontalmente desde la cabeza hasta la cola, ¡pero no cortes completamente al final de la cola! Luego, extiende el lado cortado hacia abajo (con la piel hacia arriba). Verás dos piezas de pescado conectadas, una con espinas y otra sin.

A lo largo del lado con huesos, corta finamente la carne de pescado que está pegada a los huesos, ¡otra vez, no cortes completamente en el extremo de la cola! Voltea la carne de pescado cortada hacia un lado. Ahora, tienes un lado con huesos de pescado y el otro con dos piezas de carne de pescado superpuestas.

Corta la sección del hueso, dejando un pequeño espacio para no dañar la carne del pescado del otro lado.

Con el lado cortado hacia arriba (el lado de la piel hacia abajo en la tabla de cortar), inserta el cuchillo en un ángulo de 45 grados a lo largo del vientre del pescado para quitar las espinas del vientre.

Marca la carne del pescado con un patrón de cruz, asegurándote de no cortar la piel en ningún momento. Primero, haz cortes diagonales a un ángulo de 45 grados, separados aproximadamente 0.5 cm; luego, haz cortes rectos a un ángulo de 90 grados, también separados unos 0.5 cm, creando un patrón de diamante. ¡Recuerda, no cortes la piel!

Coloque la carne y la cabeza del pescado en un bol grande, añada 6 rodajas de jengibre, 30g de vino de cocina y 1 cucharada de sal, y marine durante 15 minutos.

En un plato limpio, seco y sin aceite, esparce 200g de fécula de maíz. Cubre uniformemente la carne y la cabeza del pescado con la fécula de maíz, sacudiendo el exceso antes de freír.

Calienta una olla de aceite hasta que se formen pequeñas burbujas alrededor de los palillos sumergidos en él. Coloca la carne de pescado en una cuchara ranurada, con la cola hacia arriba y la parte de la carne hacia afuera, dale forma y luego baja al aceite. Fríe a fuego medio hasta que se solidifique, luego retira y reserva (volverás a freírlo más tarde; no deseches el aceite). También fríe la cabeza.

En otra olla, calienta un poco de aceite, agrega 150g de kétchup, luego media taza de agua, lleva a ebullición. Añade 15g de vinagre blanco, 35g de azúcar blanco suave y 2 cucharadas de sal, hierve hasta que el azúcar se disuelva, luego agrega una cucharada grande de aceite caliente y mezcla bien.

Añade 25g de guisantes verdes, 25g de zanahorias cortadas en cubitos y 15g de piñones, luego espesa con media taza de agua de fécula de maíz. Hierve la salsa y resérvala.

Calienta el aceite a 200 grados, luego reduce a fuego medio. Vuelve a freír la carne y la cabeza del pescado durante 1 minuto hasta que estén crujientes por fuera. Sirve el pescado en un plato, vierte la salsa caliente por encima y sirve inmediatamente.

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