Compañeros inteligentes, sociales y afectuosos
Las ratas a menudo evocan reacciones negativas, y la gente las asocia con chirridos, movimientos corriendo e incluso algunos gritos aterrorizados. Si bien las ratas salvajes pueden transmitir enfermedades y dañar los cultivos, es importante recordar que todas las especies tienen el potencial de causar daños. Los perros, por ejemplo, pueden atacar al ganado, los gatos pueden transmitir la salmonella e incluso los peces pueden transmitir enfermedades como Vibrio a los humanos.
A pesar de su mala reputación, las ratas son criaturas notablemente inteligentes que desempeñan funciones esenciales en los ecosistemas. Más allá de eso, son mascotas sorprendentemente maravillosas por diversas razones.
Las ratas son animales limpios
Contrariamente a su estereotipo de “sucio”, las ratas son meticulosas peluqueras. Debbie Ducommun, autora deRatas: consejos prácticos y precisos del experto, explica: “Las ratas se acicalan constantemente, dejándolas prácticamente sin olor. No requieren cepillado ni cuidado dental por parte de sus dueños”.
Los hábitos de aseo de las ratas van más allá de la simple lamida; raspan la piel muerta, la suciedad o los parásitos y usan los dientes para peinarse el pelaje y volver a colocarlo en su lugar.
Como propietario, tu principal responsabilidad es mantener una jaula limpia. La frecuencia de la limpieza depende del número de ratas y del tamaño de la jaula. Normalmente, será suficiente un lavado semanal con agua y jabón y retirar diariamente la ropa de cama sucia. Si huele a amoníaco (un olor parecido a la orina), ha esperado demasiado para limpiar.
Resistente y adaptable
Las ratas son animales resistentes, a menudo más adaptables que otros roedores como los hámsteres o los jerbos. Tanto las ratas salvajes como las domesticadas exhiben una increíble capacidad para prosperar en entornos cambiantes. La Humane Society of the United States (HSUS) señala: “Las ratas son criaturas increíblemente resistentes y no muestran dificultad para adaptarse a nuevas circunstancias”.
Esta adaptabilidad hace que las ratas sean adecuadas para varios tipos de hogares. Para las personas con vidas ocupadas, un grupo de ratas puede hacerse compañía durante el día y brindar compañía por las noches. En comparación con los perros, requieren mucho menos tiempo y atención y, al mismo tiempo, son atractivos y afectuosos.
Criaturas altamente sociales
Las ratas son animales sociales por naturaleza y prosperan en compañía. Siempre es mejor tener más de una rata, ya que pasan mucho tiempo acicalándose y jugando entre sí. Según Ducommun, “Ninguna atención humana puede reemplazar el vínculo que forman las ratas con otras ratas”.
Dicho esto, su naturaleza social también los convierte en fantásticas mascotas. Una vez que se vinculen contigo, las ratas disfrutarán de tu compañía y buscarán activamente la interacción. Su inteligencia y curiosidad los convierten en compañeros encantadores para actividades lúdicas.
Además, cuidar dos ratas no aumenta significativamente tu carga de trabajo. Las ratas pueden entablar relaciones con todos los miembros de la familia y, a menudo, disfrutan que las carguen y jueguen con ellas.
Más inteligente de lo que crees
Las ratas poseen altos niveles de inteligencia, comparables a los de los perros. Pueden resolver acertijos, navegar por laberintos e incluso aprender a responder a sus nombres. Con un poco de esfuerzo, puedes crear laberintos divertidos o proporcionarles juguetes estimulantes para mantenerlos mentalmente ocupados.
Ducommun destaca: “Las ratas son lo suficientemente inteligentes como para luchar con la mano y jugar juegos interactivos como el escondite, el tira y afloja o la etiqueta”. Sus capacidades cognitivas los hacen tan entrenables como los perros, sin necesidad de paseos ni espacio al aire libre.
Sin embargo, tenga cuidado: su inteligencia los convierte en expertos artistas del escape. Inspeccione periódicamente su jaula en busca de daños y asegúrese de que todas las puertas y tapas estén bien cerradas.
Genial para niños
Con una socialización adecuada, las ratas pueden ser excelentes compañeras para los niños. A los niños se les debe enseñar cómo manejar las ratas con cuidado y nunca se les debe dejar sin supervisión. Una vez que los niños aprendan a cuidar a estos animales con respeto, las ratas se unirán estrechamente a ellos. Debido a su naturaleza afectuosa, las ratas rara vez muerden una vez que forman una conexión con sus dueños.
Cambiando la reputación de las ratas
Las ratas son animales inteligentes, resistentes y muy sociables que merecen una segunda oportunidad como mascotas. Incluso las ratas salvajes desempeñan un papel vital en los ecosistemas al actuar como carroñeras y ayudar a mantener limpio el medio ambiente. Como mascotas, capturan nuestros corazones con sus encantadoras personalidades y su atractivo comportamiento.