Trump, Musk y Tesla: un espectáculo político y empresarial
Fue una imagen inusual en el jardín sur de la Casa Blanca: el presidente Donald Trump parado frente a una fila de vehículos de Tesla, Inc., flanqueado por el CEO de Tesla, Elon Musk, quien también dirige el Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE). Este evento funcionó tanto como conferencia de prensa como un comercial en vivo de Tesla, subrayando lo profundamente vinculadas que están las empresas de Musk con el gobierno estadounidense.
El momento fue llamativo: las acciones de Tesla han estado en problemas, eliminando todas las ganancias obtenidas desde el día de las elecciones. La caída de ventas en Europa y la creciente influencia política de Musk han provocado reacciones negativas, haciendo que sus acciones se desplomen.
Acciones de Tesla se recuperan tras declaración de apoyo de Trump
A pesar de los problemas recientes, las acciones de Tesla subieron un 3,8% el martes, recuperando parte de las pérdidas de la caída del 15% del lunes. Trump jugó un papel activo en la recuperación momentánea de Tesla, declarando en el evento:
“Cualquier violencia contra los concesionarios de Tesla será tratada como terrorismo doméstico.”
Durante su discurso, Trump también sostuvo lo que parecía una lista de precios de un concesionario Tesla, con detalles de financiación que indicaban:
“Los Tesla se pueden comprar desde $299/mes o $35,000.”

Trump promete comprar un Tesla
Como muestra de apoyo personal, Trump anunció que compraría un Tesla, revelando que ya había adquirido un Cybertruck de Tesla para su nieta. También publicó en Truth Social:
“Compraré un Tesla nuevo mañana por la mañana como muestra de confianza y apoyo a Elon Musk, un verdadero gran estadounidense.”
También calificó los boicots contra la empresa como “ilegales”.
La montaña rusa de las acciones de Tesla

Musk alcanzó su máxima fortuna inmediatamente después de las elecciones presidenciales de EE.UU. de 2024, cuando los inversores creyeron que su influencia en el gobierno de Trump llevaría a la desregulación del mercado de vehículos eléctricos (EV). Sin embargo, la realidad fue diferente.
En lugar de un camino fácil, las políticas arancelarias de Trump han creado volatilidad en el mercado, llevando las acciones de Tesla a caer casi un 45% este año. Los principales factores detrás de esta caída incluyen:
- Ventas en picada en Europa, afectando los ingresos globales.
- El creciente rol político de Musk, que está alejando a los inversores.
- Preocupaciones sobre el DOGE, que según analistas arrastra a Tesla a controversias políticas.
Reacciones mixtas en Wall Street
Los analistas están divididos sobre el futuro de Tesla:
Perspectiva pesimista:
- Un informe de Wedbush Securities advirtió que si Musk prioriza roles gubernamentales sobre Tesla, la reputación de la marca podría deteriorarse más.
- Analistas temen que la politización de Tesla dañe el sentimiento del consumidor a largo plazo.
Perspectiva optimista:
- Wedbush también destacó que la innovación tecnológica de Tesla sigue siendo sólida, prediciendo que solo el 5% de los dueños reconsiderarían su compra por la actividad política de Musk.
- Algunos inversores ven la caída como oportunidad de compra, creyendo que los fundamentos de la empresa siguen fuertes.
Trump sobre descuentos: “No quiero uno”
Durante el evento, Trump aclaró que pagaría precio completo por su Tesla, rechazando cualquier favoritismo:
“Musk me daría un descuento, pero si lo acepto, dirán que obtuve beneficios especiales.”
¿Qué sigue para Tesla y Musk?
Con las acciones fluctuantes y Musk equilibrando su imperio corporativo con responsabilidades gubernamentales, el futuro de Tesla es incierto. Preguntas clave:
- ¿Podrá Musk reenfocarse en Tesla, o la política seguirá opacando a la empresa?
- ¿Las políticas arancelarias de Trump impactarán más el mercado global de Tesla?
- ¿Está la imagen de Tesla en riesgo por controversias políticas?
Por ahora, Tesla tiene el respaldo de Trump, pero queda por ver si eso basta para estabilizar sus acciones.